Fomentar el amor por la lectura desde la infancia es más efectivo cuando los niños se sienten dueños de su propio espacio literario. Involucrarlos en la creación y personalización del rincón de lectura no solo aumenta su entusiasmo, sino que también fortalece su conexión emocional con los libros. Aquí te presentamos ideas prácticas para lograrlo.

1. Permíteles elegir el lugar

Antes de empezar, pregúntales dónde les gustaría tener su rincón de lectura. Puede ser un rincón de su habitación, bajo una escalera o incluso una tienda de campaña en la sala. Lo importante es que sea un espacio donde se sientan cómodos y tranquilos.

2. Decoración colaborativa

• Dibujos y manualidades: Invítalos a crear dibujos, murales o móviles con motivos literarios para colgar en las paredes.
• Selección de colores: Permíteles elegir los colores de cojines, alfombras o cortinas para que el espacio refleje su personalidad.
• Etiquetas creativas: Que diseñen etiquetas para organizar sus libros por categorías (aventuras, animales, fantasía, etc.).

3. Selección de libros

Llévalos a la biblioteca o librería y deja que escojan algunos títulos que les llamen la atención. También pueden reorganizar sus libros favoritos en estanterías accesibles.

4. Incluye elementos interactivos

• Un "diario de lectura": Donde puedan dibujar o escribir sobre los libros que han leído.
• Una "caja mágica": Para guardar objetos relacionados con sus historias favoritas (ejemplo: una piedra si leen sobre dinosaurios).

5. Hazlo un espacio multifuncional

Algunos niños prefieren leer acostados, otros sentados o incluso balanceándose. Incorpora cojines grandes, una hamaca o un puff para que elijan cómo disfrutar su lectura.

6. Rotación temática

Cada mes, pueden redecorar el rincón según un tema (espacio, océano, selva) relacionado con sus lecturas actuales. Esto mantendrá vivo su interés.

Conclusión

Un rincón de lectura personalizado no solo motiva a los niños a leer más, sino que también les enseña a tomar decisiones y expresar su creatividad. Al involucrarlos en el proceso, el espacio se convierte en algo verdaderamente suyo: un refugio de imaginación y aprendizaje.

¿Has probado alguna de estas ideas?